A CINCUENTA AÑOS DE LA CONTRARREVOLUCIÓN .pdf
Nombre del archivo original: A CINCUENTA AÑOS DE LA CONTRARREVOLUCIÓN.pdf
Autor: Gustavo Adolfo Pardo Paredes
Este documento en formato PDF 1.5 fue generado por Microsoft® Word 2010, y fue enviado en caja-pdf.es el 08/09/2014 a las 19:24, desde la dirección IP 200.12.x.x.
La página de descarga de documentos ha sido vista 1215 veces.
Tamaño del archivo: 192 KB (2 páginas).
Privacidad: archivo público
Vista previa del documento
CINCUENTA AÑOS DE LA CONTRARREVOLUCIÓN
Algunos medios de comunicación, nacionales y extranjeros, han publicado que la
contrarrevolución de 1954 en Guatemala, planeada y dirigida por la CIA, sumió al país
en el atraso económico y detuvo el progreso social que el gobierno de Jacobo Arbenz
Guzmán había iniciado, y con el cual se ponía fin a la dominación que los
conquistadores impusieran a sangre y fuego a la población, sometida por medio de la
crueldad y el genocidio de los españoles, auténticas bestias enmascaradas tras una
burda civilización, que se dio a la tarea de anular todo cuanto representara la cultura
de los pueblos originarios hasta hoy en resistencia.
El gobierno de los Estado Unidos de Norte América, recogió oportunamente el legado
español, y como maestros en el arte del instrumentalismo, hizo de la burguesía
nacional y de buena parte de la pequeña burguesía, sirvientes del imperialismo yanqui,
exacerbando el individualismo, haciéndoles creer que eran hombres de empresa
luchando por la “liberación nacional” y contra el “comunismo internacional” De esa
cuenta les llenó los bolsillo con dólares manchados con la sangre del pueblo.
Ahora, cuando estamos por arribar a un aniversario más de la Revolución de Octubre
de 1944, y hacemos el recuento de lo que nos legó el entreguismo de los sirvientes del
imperialismo, con toda la solvencia moral podemos afirmar, como hijos bien nacidos de
esta patria, que la sociedad capitalista y en particular la de Guatemala, se ahoga en la
crisis económica, que todos los indicadores sociales de la explotación, la opresión y la
pobreza, no solo no han desaparecido sino que se han agravado considerablemente.
El desempleo en nuestro país alcanza aproximadamente el 60%; los hospitales son
insuficientes, se encuentran en pésimas condiciones, carecen de medicinas y los
enfermos se mueren en las aceras en espera de atención médica; la violencia ha
alcanzado niveles asombrosos, a la juventud se le envenena con drogas de todo tipo y
se le asesina todos los días en cualquier calle. Mientras, que todos los que aún tienen
la oportunidad de despeñar un trabajo, deben soportar el abuso de los patrones,
quienes les han impuesto salarios base bajísimos, jornadas de trabajo de doce o más
horas. Aunado a lo anterior, el Estado como institución típicamente burguesa, ha caído
en manos de la delincuencia de cuello blanco, que ha tomado ese ente también como
un medio de hacer fortuna al más corto plazo.
Por otro lado, y como consecuencia de la misma incapacidad de la burguesía de
servidumbre que predomina en Guatemala y que durante 50 años no ha podido
impulsar ningún cambio significativo para la sociedad guatemalteca; solamente se ha
dedicado a saquear el Estado apropiándose de las riquezas nacionales, hipotecando el
país con los imperialistas, especialmente con los EEUU। Ha sumido a la población en la
desesperanza, pues la actividad económica que durante mucho tiempo constituyó la
espina dorsal --la agricultura-- se encuentra hoy en una situación deplorable, que
evidencia haber dejado de ser una opción capitalista para generar empleo, generar
divisas suficientes para sostener la convivencia fuera de los conflictos económicosociales. Por el contrario, y pese a que los agro-exportadores están llegando a su fin,
la burguesía se aferra a la propiedad de la tierra y se niega a reconocer el derecho de
los pobladores a trabajar y vivir en ella, calificando de ideológica toda reclamación
sobre la misma, pretendiendo olvidar que se apropiaron de las tierras de cultivo con
base en la expulsión, represión y aniquilación de la población campesina, única dueña
legítima de esa extensiones.
La burguesía nacional y la pequeña burguesía ya no pueden seguir culpando de la
deplorable situación económica y social en que vi ve la sociedad guatemalteca al
comunismo। Esa excusa solamente cabe en mentes obscenas de la Derecha nacida del
MLN, que no aceptan haber sido simples sirvientes del imperialismo y ser incapaces de
mejorar la situación a pesar de estar haciendo gobierno desde 1954 a la fecha.
Tampoco son capaces de entender por qué el imperialismo de los últimos tiempos los
hace a un lado, después de haber sido fieles guardianes a sus amos. La burguesía
servil se ahoga en su propia ineficacia, hicieron fortuna sangrando al pueblo trabajador
de la manera más sanguinaria y enfermiza que se pueda concebir, actuaron igual o
peor aún que los psicópatas que realizaron la conquista y que hoy honran
estúpidamente en los programas educativos.
Por lo que aquí se ha dicho, es necesario luchar porque el pueblo se mantenga alerta y
comprenda de una vez por todas, que de la burguesía servil a los intereses
imperialistas no puede salir ninguna solución genuina para los graves problemas que
afronta la sociedad capitalista y en especial la de Guatemala। Las soluciones que los
pueblos requieren no pasan por la mente de los burgueses. Por lo tanto tenemos que
plantearnos una nueva fase de lucha, donde las soluciones vengan del mismo pueblo y
su organización de vanguardia: el partido de los comunistas. No se trata de un partido
más que haga gobierno codo a codo con la burguesía servil o que se deje cooptar a su
régimen, sino del partido que aspira a cambiar el sistema de relaciones mercantiles
que dominan en todos los órdenes del capitalismo.
Agosto 2004.
Fuente: http://partidocomunistadeguatemala.blogspot.com/2008/10/cincuenta-aos-de-la-contrarrevolucin.html
Descargar el documento (PDF)
A CINCUENTA AÑOS DE LA CONTRARREVOLUCIÓN.pdf (PDF, 192 KB)
Documentos relacionados
Palabras claves relacionadas
capitalista
sociedad
imperialismo
servil
todos
poblacion
estado
sirvientes
partido
guatemala
burguesia
situacion
pueblo
gobierno
nacional