Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. Marcos 16.15

La Victoria
de Jesús
Juan 1:1,14

San Juan
Capítulo 1

Versículos 1 y 14

En el principio era el Verbo,
y el Verbo era con Dios, y
el Verbo era Dios.
Y aquel Verbo fue hecho
carne, y habitó entre
nosotros (y vimos su gloria,
gloria como del unigénito
del Padre), lleno de gracia
y de verdad.

Era = Dejo de ser en su poder, potencia,
majestad y gloria.
Cristo se despojó de su deidad: Para habitar entre
nosotros como hombre le fue quitado todas las
atribuciones de poder y potencia que tenía en la
gloria celestial como Dios.
Cuando se hizo hombre tomo todas las
atribuciones que cada uno de nosotros tenemos.

¿CUÁLES SON ESAS ATRIBUCIONES?

1 – Alma

2 – Cuerpo

3 – Espíritu

1. Alma (Emociones, carácter, sentimientos)
Cristo tuvo las mismas emociones que nosotros, tuvo
carácter, sentimientos de hombre.

Mateo 26:39
Yendo un poco adelante, se postró sobre su rostro, orando
y diciendo: Padre mío, si es posible, pase de mí esta copa;
pero no sea como yo quiero, sino como tú.

¿CUÁLES SON ESAS ATRIBUCIONES?

1 – Alma

2 – Cuerpo

3 – Espíritu

2 - Cuerpo (Las tentaciones)
No cabe duda que él fue tentado en las pasiones juveniles,
relaciones sexuales, música, bailes, vicios, malas palabras.
Por lo tanto también él tuvo todas características de
hombre en la carne, o sea también tuvo que pasar
tentaciones.
Lucas 2:52
Y Jesús crecía en sabiduría y en estatura, y en gracia para
con Dios y los hombres.

¿CUÁLES SON ESAS ATRIBUCIONES?

1 – Alma

2 – Cuerpo

3 – Espíritu

3 - Espíritu:
Paso por momentos de debilidad interna
(espiritual)
Mateo 26:38
Entonces Jesús les dijo: Mi alma está muy
triste, hasta la muerte; quedaos aquí, y velad
conmigo.

Ejemplos de la fortaleza de Jesús
Hebreos 4:15

Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda
compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en
todo según nuestra semejanza, pero sin pecado.

Lucas 4:1-2

Jesús, lleno del Espíritu Santo, volvió del Jordán, y fue llevado por el
Espíritu al desierto.
Por cuarenta días, y era tentado por el diablo. Y no comió nada en
aquellos días, pasados los cuales, tuvo hambre.

¿En dónde radico la victoria de Cristo en su
ministerio?
Juan 3:16

Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito,
para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
• Si Jesús no hubiera sido obediente, aunque Dios amo al mundo, Cristo no
hubiera bajado de la Gloria incorruptible a este mundo corruptible, pero
Jesús mostro obediencia y amor al prójimo.
• Jesús no dijo, bajar a sacrificarme y morir por los que aborrecen tu
nombre, por los desobedientes, por los que aman más el pecado que hacer
tu voluntad, eso no lo dijo.

CARACTERÍSTICAS DE JESÚS EN SU VIDA
PERSONAL Y MINISTERIAL
1 Comunión perfecta con el Padre
Cristo oraba constantemente y leía la palabra de Dios el Padre (Antiguo Testamento)
Pregunta: como es su comunión con el Padre

2 Obediencia perfecta al Padre
Todo me es lícito pero no todo conviene
Pregunta: como es su actitud actual, obediencia o desobediencia

3 Amor al prójimo
Perdónalos porque no saben lo que hacen (nosotros si sabemos lo que hacemos)
Pregunta: como es su amor al prójimo, hacia los demás.
Amaras al prójimo como a ti mismo.

La actitud de Jesús
Juan 13:15

Cristo dijo: Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho,
vosotros también hagáis.
¿Qué ejemplo? Las 3 características por las cuales cristo fue victorioso.

Romanos 12:2

No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la
renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la
buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.

Cuando Jesucristo venció, le fue restaurada toda
potestad y autoridad en el cielo y la tierra.
Mateo 28:18

Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me
es dada en el cielo y en la tierra.

PREGUNTA Y CONCLUSIÓN:

Realmente quieres la victoria, si la respuesta es SI, entonces
ya sabes que hacer, que ejemplo a seguir.

Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. Marcos 16.15