Asegurar una condición similar seca o húmeda en todo el campo
de cultivo es esencial para mantener un buen rendimiento, para
esto es importante nivelar el campo de arroz de manera adecuada.
Una Producción del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional a través del Instituto Nicaragüense de Tecnología Agropecuaria (INTA)

Ventajas en el uso de la
Técnica Húmedo-Seco (THS)
•

Menos extracción de agua pasando de 28,000 metros cúbicos a
13,000 por ciclo del cultivo.

•

Reducción en el uso de agua de riego hasta en un 30% sin
reducir los rendimientos.

•

Ahorro de energía.

•

Menor riesgo de contaminación de los cuerpos de agua.

•

Reduce las emisiones de metano en un 48% en comparación
con la anegación continua en los campos de arroz.

•

Facilita el uso óptimo del agua de riego.

Manejo eficiente de agua de riego
en la producción de arroz usando
la técnica húmeda seco

Nivel de agua a
15 centímetros
bajo la
superficie del
suelo.

La reproducción de este material es financiado por KOLFACI

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Para garantizar la producción de arroz, se utilizan grandes
cantidades de agua para riego por inundación utilizando hasta
43,000 metros cúbicos anuales, asociado con sistema de bombeo
de combustión. Además la mala nivelación del terreno no permite
una buena distribución del agua en el cultivo, incidiendo en gastos
innecesarios de este recurso.

Proceso de aplicación de la THS
Después del riego en el campo
de arroz, la profundidad del
agua disminuye gradualmente
debido a la transpiración de
las plantas, la evaporación y la
infiltración en el suelo.

Como una medida de ahorro y uso más racional del agua, el INTA
está promoviendo la implementación de la técnica húmedoseco (conocida como THS), mediante la cual el aporte de agua de
riego podría reducirse sustancialmente hasta un 35% sin afectar
significativamente el rendimiento del arroz.

En qué consiste la THS
Consiste en alternar el riego por inundación con períodos secos
en los campos de arroz. Durante los primeros 21 a 30 días después
de la siembra directa o el trasplante, se mantienen de 2 a 3
centímetros de agua para controlar las malezas y para garantizar
que el cultivo se reponga del trasplante.
Después de inundar el terreno, se deja que el campo seque hasta
que el agua esté unos 15 centímetros debajo de la superficie del
suelo. Luego el campo se vuelve a inundar a un nivel aproximado
de 3 a 5 centímetros antes de drenarlo de nuevo. Este esquema de
riego se repite durante el ciclo de crecimiento del cultivo, excepto
durante la época de floración, en que el campo se mantiene
inundado a un nivel de 3 a 5 centímetros.

Parte superior
no perforada

10 cm

Nivel del suelo

Parte inferior
perforada

20 cm

La técnica húmedo – seco, se
inicia después de 21 a 30 días
donde se monitorea el nivel
del agua en la parcela. Esto se
logra mediante la instalación
de un “tubo medidor de
agua”, generalmente de PVC,
que se usa para controlar la
profundidad del agua. El tubo
permite medir la disponibilidad
de agua en el campo debajo
de la superficie del suelo. Este
debe tener un diámetro de
7 a 10 centímetros y 30 de
largo, con perforaciones en los
20 centímetros desde el fondo.

7-10 cm

Instalar el tubo enterrando totalmente la parte perforada, las
perforaciones permiten que el agua entre al tubo desde el suelo,
de esta manera se puede saber cómo están los niveles.
Una vez que el agua dentro del tubo baja hasta 15 centímetros,
significa que se debe aplicar un nuevo riego con una lámina de
5 centímetros sobre la superficie del suelo.

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